Enlace a la noticia:Canal Patrimonio: 118 años del descubrimiento de la Dama de Elche
Hoy nos hacemos eco, de la mano de la plataforma Canal Patrimonio, de los 118 años del descubrimiento de la Dama de Elche, quizás la escultura más representativa del mundo Íbero. Canal Patrimonio nos muestra los avatares de la famosa dama hasta su ubicación actual en el MAN (visita más que recomendable si andáis por Madrid) y el eterno debate sobre si la Dama debería continuar en el Arqueológico Nacional o en su lugar de origen, Elche (recomendable también el yacimiento de La Alcudia donde fue encontrada).
Este debate no es único de nuestra famosa Dama sino una constante desde principios del siglo XX, cuando la sociedad y los Estados toman conciencia de la importancia del patrimonio y se encuentran con que parte de ese patrimonio representativo está disperso, siendo el ejemplo más destacable el de parte del friso del Partenón, que se encuentra en el Museo Británico y cuya devolución es una constante de las autoridades atenienses y griegas.
El debate está servido, ¿deben conservarse los restos en su lugar de origen?. Hay demasiados factores a tener en cuenta, muchos de ellos políticos y sociales y la solución no es fácil ni extensible a todos los casos. Para La tablilla de cera la máxima a seguir es clara: la pieza debe tener la mejor conservación posible. Debemos atender en primer lugar, a la conservación de la pieza a discutir y los peticionarios de la devolución deben asegurar una conservación y protección al menos igual a la del lugar donde se encuentre la pieza en ese momento. En segundo lugar se debería considerar su musealización o exposición, es decir, que la pieza se muestre correctamente y sea lo más accesible al público; en este punto es obvio que hay sitios que cuentan con ventaja natural -e injusta- respecto a otros por su mayor afluencia, pero para La tablilla, la educación y el enriquecimiento cultural por medio de la visualización del patrimonio debe de primar respecto a consideraciones políticas y sociales. En tercer lugar y posiblemente contradictorio con el anterior, la pieza debe de ser mostrada lo más correctamente posible en su contexto histórico y geográfico -ventaja para los lugares de origen-. De tal forma que con estos tres factores, los centros de exposición (museos y centros de interpretación principalmente) inviertan constantemente en mejorar en conservación y exposición de cara a la custodia de la pieza.
Y no terminamos sin antes añadir más leña al fuego con una tercera opción: ¿qué opináis de la custodia compartida?
Para saber más:
La Dama de Elche (Artehistoria.com)
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